mar 06 2013
Sopela, un municipio con superávit. Entrevista a Leire Pinedo, concejal de Hacienda.
“La clave está en racionalizar los gastos de cada área, evitando despilfarros, y asegurar los ingresos, ejerciendo un control férreo sobre los tributos municipales. Así, Sopela será capaz de saldar todas las deudas heredadas del anterior equipo de gobierno, durante el año 2013.”
La concejal de Hacienda de Sopela, compañera de Eusko Alkartasuna y cargo de la coalición EHBILDU, nos explica que, cuando llegaron hace año y medio al Ayuntamiento, se encontraron con dos grandes deudas. La primera era un préstamo de 700.000 euros concedido en 2009 al Consistorio sopelaztarra, que debía de empezar a pagarse este año. La segunda, correspondía a una cantidad debida a la Diputación Foral de Bizkaia (Udalkutxa) de casi 600.000 euros.
Por tanto, a pesar de que las cuentas arrojaban un saldo positivo, las deudas pendientes, convertían la situación en complicada. Ante esta tesitura, el equipo de gobierno de EHBILDU hizo lo que tenía que hacer, cumplir con sus compromisos electorales y llevar a cabo “un plan de gestión municipal lógico y con verdaderas líneas rojas” Un plan de gestión con enfoque de izquierda.
Pinedo aclara que “se ha llegado a generar un superávit tal que se puede saldar este ejercicio toda la deuda del Municipio de Sopela, sin haber reducido ninguno de los servicios municipales” ¿Cómo? La Concejal nos lo ha explicado al detalle y punto por punto:
1.- Control del gasto: a) Se estableció un plan conjunto entre las distintas áreas de gestión municipal por el que se marcaba como punto central el control exhaustivo del gasto en cada una de ellas. A tal efecto, se nombró un responsable por área. b) Se negoció el ajuste de presupuestos, eliminando gastos innecesarios, con cada una de las empresas suministradoras (telefónica, recogida de basuras, gestión de oficina de turismo…) c) Se empezaron a barajar varios presupuestos para cada proyecto y, de ellos, se escogía el que, conservando la calidad, fuese más barato. Esto que parece obvio, no era una práctica habitual en el pasado.
2.- Aseguramiento de los ingresos: a) la política de férreo control sobre el cobro de los tributos de competencia municipal, ha logrado que se hayan ingresado unos 100.000 euros más de los presupuestados inicialmente. Esto sitúa a Sopela en una posición privilegiada frente a la mayoría de municipios que no llegan a ingresar lo presupuestado. b) se trazó un plan estratégico de búsqueda de subvenciones que ha posibilitado diversificar las fuentes de financiación del Ayuntamiento.
Todo lo que nos ha contado nuestra compañera, Leire Pinedo, no es más que la puesta en práctica de un modo de gestionar los recursos municipales mirando al pueblo y dejando de lado otros intereses, que nada tienen que ver con el servicio público, al que se supone que ha de dedicarse toda persona que trabaje en política. Existe otro modo de hacer las cosas y de hacer frente al actual sistema y en EHBILDU lo estamos demostrando y seguiremos haciéndolo.
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